«Cuando me traducen, siempre pido que transmitan la poética trágica de mis libros», Svetlana Alexiévich
1. Prestigiosa periodista y escritora bielorrusa. Su fructífera carrera literaria ha sido reconocida con innumerables galardones: es oficial de la Orden de las Artes y de las Letras de la República Francesa, obtuvo el Premio de la Paz de los libreros alemanes (2013), el Premio nacional del Círculo de Críticos de Estados Unidos (2006), el Premio Nobel de Literatura (2015)… Toda su obra ofrece un retrato profundamente crítico de la antigua Unión Soviética. Con la sola ayuda de una grabadora y de su tenacidad, Svetlana Aleksiévich mantiene a través de sus libros la memoria viva de diferentes tragedias, de eventos de gran trascendencia histórica para la URSS.
2. La voz de la gente común. Alexiévich ha centrado su carrera literaria en escuchar a la gente sencilla y en transmitir las pequeñas historias de los hombres y mujeres comunes, envueltos a su pesar en eventos extraordinarios. Su obra es una fotografía de la dimensión humana de los hombres, y las mujeres pequeños. Ha escuchado así las voces (no tenidas en cuenta nunca antes) de mujeres rusas y ha escrito sobre su participación en la Segunda Guerra Mundial (‘La guerra no tiene rostro de mujer’); se ha hecho eco de las experiencias de los supervivientes de la invasión soviética a Afganistán (‘Los muchachos de zinc’) y del accidente nuclear de Chernóbil (‘Voces de Chernóbil: crónica del futuro’). En último libro, sobre la caída de la Unión Soviética y los años posteriores, ‘El fin del Homo Sovieticus’, la periodista da voz a cientos de damnificados, cartografiando al individuo soviético y postsoviético.
3. Svetlana y la guerra. Uno de los grandes temas de su obra. “Escribo sobre la guerra… Yo, la que nunca quiso leer libros sobre guerras (…). La guerra siempre estuvo presente: en la escuela, en la casa, en las bodas y en los bautizos, en las fiestas y en los funerales. Incluso en las conversaciones de los niños.” Sin embargo, para ella la persona es más que la guerra: así, no escribe solo sobre la guerra sino sobre el ser humano en la guerra.
4. Historiadora de sentimientos. No una historiadora de lo oficial, de lo que ya ocupa toneladas de panel en centenares de biblioteca en el mundo. La periodista pone en el centro lo imperceptible, lo esencial; es una historiadora del alma: “Me interesa no solamente la realidad que nos rodea, sino también la que está en nuestro interior. Lo que más me interesa no es el suceso en sí, sino el suceso de los sentimientos. Digamos, el alma de los sucesos. Para mí, esos sentimientos son la realidad”.
5. Premio Nobel de Literatura 2015. En octubre de 2015, la Academia Sueca sorprende al mundo de las letras al premiar con el Nobel de Literatura por primera vez a un autora cuya obra es íntegramente de no ficción. Se reconocía así el género del reportaje periodístico como altamente premiable. La trayectoria de Svetlana Alexiévich es considerada por fin una obra periodística de enorme altura que merecía un premio a la altura. El dictamen de la academia destacaba “sus escritos polifónicos, un monumento al sufrimiento y al coraje en nuestro tiempo”.