Millás ha hablado sobre el proceso de creación que sigue en sus novelas y ha desvelado que nunca escribe sabiendo qué va a ocurrir en la página o en el capítulo siguiente. “Yo empiezo a escribir a partir de algo que me obsesiona e interesa y después empiezo a tirar del hilo”.
Para el escritor el comienzo de una novela es como el de un naufragio porque “solo te puedes guiar por tu olfato”. Y cuando sus alumnos le dicen que se han quedado en blanco escribiendo alguna novela, su consejo es: “No tienes que inventar nada, tienes que escuchar lo que hay en la primera parte y dejar que salga solo”.
Juan José Millás y Juan Cruz también han hablado de la unión de ficción y realidad. “Normalmente separamos ficción y vida. Sin embargo, yo mantengo que la ficción está incrustada en la vida, y no solo eso, también la determina”, ha destacado el escritor. “La ficción es tan importante en nuestras vidas que estamos más dispuestos a morir por realidades imaginadas, que por realidades tangibles”, ha añadido.
En cuanto a la capacidad de imaginación de las personas, Millás ha sido muy crítico: “Todo el día estamos imaginando cosas, estableciendo fantasías. Pero no somos conscientes de esa actividad continua porque suele estar censurada. Desde pequeños, en la educación, los niños imaginativos dan miedo y lo que se hace es amputarles esa imaginación“.
Maestro consumado de la literatura psicológica, Millás combina aquí todos los ingredientes que ya son una celebrada marca de su literatura: el humor y la ironía, las distintas facetas de la realidad, la búsqueda de la identidad y el desdoblamiento del yo, la soledad y la constatación de una verdad inmutable. Con un ritmo in crescendo y un estilo fluido y directo, consigue introducir al lector en una vertiginosa historia en la que nada es lo que parece. Se trata así de un viaje a las pasiones, tan aladas como destructivas, que a su vez propone una reflexión nada inocente sobre los límites entre la realidad y la ficción y la ética de toda creación, ya sea literaria o dramática.
Este evento ha sido interpretado a LSE, se ha podido seguir en streaming en esta web y en redes con #QueNadieDuerma.