![](https://espacio.fundaciontelefonica.com/wp-content/uploads/2017/05/13_Julia-Baier-untitled-work-cycle-„Geschwebe”-2014-©-Julia-Baier-260x260.jpg)
De la mano de Julia Baier nos adentramos en una nueva dimensión fotográfica. Dejando de lado el documental, lo interesante ahora es perturbar e invitar a la reflexión. El espectador, incluso, necesita de unos minutos para llegar a descifrar la imagen.
![](https://espacio.fundaciontelefonica.com/wp-content/uploads/2017/05/5_Fronçois-Fontaine-Grace-Kelly-To-Catch-a-Thief-Alfred-Hitchcock-1955-work-cycle-„Silenzio-Mémoires-de-Cinéma”-2012-©-Fronçois-Fontaine-260x260.jpg)
François Fontaine plantea un desafío a través de estas imágenes realizadas con cámara Leica. Utilizando el desenfoque consigue hacer un juego visual con escenas de películas y provocarnos recuerdos, asociaciones, sensaciones…
![](https://espacio.fundaciontelefonica.com/wp-content/uploads/2017/05/barber-260x260.jpg)
La fotografía en color tuvo en la cámara Leica el aliado perfecto. Mientras grandes como Cartier-Bresson seguían apostando por el blanco y negro, otros como Fred Herzog encontraban en el color su sello.
![](https://espacio.fundaciontelefonica.com/wp-content/uploads/2017/05/F.C.-Gundlach-Reportage-for-Nino-Hamburg-St.-Pauli-1958-©-F.C.-Gundlach-OK-260x260.jpg)
La llegada de la moda en serie coincidió con el boom de la cámara Leica. Con ambas, floreció una nueva forma de mostrar la moda en la que las emociones y los impulsos son los protagonistas.
![](https://espacio.fundaciontelefonica.com/wp-content/uploads/2017/05/inundaciones-260x260.jpg)
A través de estas fotografías nos adentramos en la figura de Oskar Barnack, el creador de la cámara Leica.
![](https://espacio.fundaciontelefonica.com/wp-content/uploads/2017/05/urleica_post-260x260.jpg)
Una cámara elegante que ya sorprendía a clientes y fotógrafos en los inicios de la fotografía con cámaras de 35 mm.
![](https://espacio.fundaciontelefonica.com/wp-content/uploads/2017/05/Nana-Place-Blanche-Paris-1961-©-Christer-Strömholm-Estate-2014-260x260.jpg)
«Cada noche cogía mi pipa, mi antigua Leica, algunos carretes Tri-X, intentaba recordar mi pobre francés y me dirigía a la Brasserie de la Place Blanche.», Christer Strömholm