Hace ya más de tres años que Ferran Adrià no vestía su chaqueta de cocinero. Y lo ha hecho de nuevo, desde una de la sala que alberga su exposición ‘Ferran Adrià. Auditando el proceso creativo’ en el Espacio Fundación Telefónica, para, generosamente, hacer partícipes a solo ocho comensales de una experiencia única: ‘Comer conocimiento’, el germen de toda una serie de experiencias gastronómicas que el chef catalán pondrá en marcha en los próximos meses. Un viaje sensorial inédito durante el cual el cocinero descubrió ante un auditorio mínimo y entregado su proceso creativo en elBulli a lo largo de 25 años.
En el ensayo general el chef ya lo advertía: “Va a haber momentos mágicos”. Y los ocho comensales entran así en el espacio -una recreación de un almuerzo como los que se servían en el que fue el mejor restaurante del mundo- entre sonrisas nerviosas y expectación. Les recibe Luis García, exjefe de sala de elBulli, que será el encargado de coordinar el servicio y de atenderles. Leen la carta y se inicia el debate: “¿Seré yo digno de este plato? ¿Estaré a la altura de esta cocina que todo el mundo admira y reconoce?». Dudas, nervios, expectativas. Los invitados se sientan a la mesa y opinan. Y es que la acción se plantea desde el inicio como un diálogo abierto en dos direcciones: “Estamos dialogando, la gastronomía es dialogar: elBulli era una reflexión sobre la vida. Había gente que entraba en el juego otra gente no lo hacía. Pero nunca lo forzábamos”, admitirá el chef.
Minutos más tarde Ferran Adrià hace su aparición y les emplaza a divertirse. Esas eran sus palabras en la Cala Montjoi cuando recibía a los afortunados clientes: “que os divirtáis”. El cocinero les explica que lo que van a experimentar durante las próximas horas es un nuevo formato donde vivir la gastronomía. No será una comida al uso, sino algo menos solemne. La idea es disfrutar y pasarlo bien. Y es que “no hay comida rara, hay gente rara”.
Y así da comienzo una acción bajo la apariencia de un almuerzo y en formato de clase magistral donde lo que se degusta es la metodología, las influencias, herramientas, el saber y el conocimiento, todo aquello que hizo posible el encumbramiento de elBulli. Adrià desgrana así algunos de sus secretos. Una comida narrada donde el menú ha sido seleccionado por el propio chef, un viaje por el universo de los sentidos que arranca con el tradicional plato del pan con mantequilla para continuar con la pulverización del dry martini, el olor a trufa negra, la espuma de humo, las semillas, las secuencias de Japón, las especias y concluye con la degustación del obulato.
Esta puesta en escena comparte más aplicación y técnicas con formatos artísticos que con formatos culinarios, donde cada plato ha sido preparado y servido de forma distinta: fotografías, audiovisuales, relatos… para descubrir y entender mejor el universo creativo e innovador del propio Adrià. El mismo menú degustación, que los comensales se han llevado de recuerdo, es una evocación al lenguaje visual recreado durante toda la acción. Se trata de un dado de ocho caras que recoge los ocho platos degustados y que homenajea al dramaturgo catalán Jaume Brossa y su célebre movimiento surrealista Dau Al Set, un lenguaje de poesía visual que recuerda al que han podido vivir hoy los participantes y evoca sensaciones parecidas.
Este experimento creativo ‘Comer conocimiento’ se enmarca dentro de las acciones asociadas a la gran exposición que ha producido Fundación Telefónica y que todavía puede disfrutarse hasta el 8 de marzo. Un experimento ideado por los publicistas Jorge Martínez y Toni Segarra, que han diseñado y dirigido este evento en estrecha colaboración con Adrià y su equipo de elBullifoundation, y en el que han participado, además, miembros de Fundación Telefónica, así como los periodistas Mario Tascón, de Prodigioso Volcán y Mar Abad, de Yorokobu.
El resultado de lo vivido en Espacio Fundación Telefónica podrá verse a mitad de febrero en la cadena de televisión Paramount Channel y recogerá además de la comida, el testimonio de los ocho comensales que relatarán la experiencia vivida.
Todo es elBulli
La maquinaria de elBulli sigue funcionando, pero nunca volverá a ser un restaurante. El equipo creativo de Ferran Adrià está investigando nuevos formatos para que el público viva la cocina. Según el propio Adrià, la exposición ‘Ferrán Adrià. Auditando el proceso creativo’ es gastronomía, es otra forma de consumir la creatividad de elBulli. La exposición también es elBulli.
“En sólo cuatro meses va a pasar por esta exposición más gente que por elBulli en toda su historia”, ha asegurado Adrià durante el rodaje, “los que no han comido nunca en elBulli no vivirán aquello, pero los que comieron allí tampoco han experimentaron la exposición”.
El documental ‘Comer Conocimiento’ que se ha rodado en el Espacio Fundación Telefónica es “una evolución de la exposición”, según Adrià. Esta conferencia en forma de almuerzo sirve como experimento, como prototipo para las acciones que la fundación de elBulli está preparando y que irá anunciando en los próximos años.
Adrià y su equipo darán el siguiente paso en Ibiza. Ahondando en la idea de los nuevos formatos de gastronomía, el cocinero catalán ha explicado que su próximo proyecto será un espacio en Ibiza en colaboración con Cirque du Soleil en el Gran Hotel de la isla. Será un espacio empotrado en el ambiente festivo de Ibiza, “para tomar algo, para relajarse”. En el nuevo proyecto de Adrià, las fronteras entre la performance y la gastronomía se diluyen, pero él insiste en que no se trata de un espectáculo que exija la concentración del espectador. Y habrá comida, claro, aunque no ha revelado muchos más detalles sobre esto. Sólo sabemos que Albert Adrià ya está trabajando en la carta.
Por Adriana Herreros y Víctor Navarro.