©Foto: fotogramas original (izquierda) y coloreado (derecha) de una grabación perteneciente al Archivo Audiovisual de Telefónica.
Tecnología, memoria y color
La tecnología y la memoria colectiva vinculadas a cada época están estrechamente unidas. Tanto que a cada periodo le asignamos una tonalidad, la propia de las técnicas disponibles de ese momento. Quizá ahí radica el por qué de lo extraño que nos resulta ver coloreadas imágenes que relacionamos con unos tiempos en blanco y negro. Los personajes que las habitan, al no estar en color, los consideramos ajenos a nosotros. Y, al teñirse de los colores de nuestra realidad, pasan a ser iguales, con las mismas preguntas y sueños. Pasan a ser nuestros contemporáneos con solo aplicar una capa de color cuidadosamente diseñada por la inteligencia computacional.
Pinta y colorea tú mismo
Revivir el pasado a través del color da muestra del poder tan vital que conlleva este intangible. Al mirar detenidamente esas imágenes antiguas coloreadas, podemos extrañarnos por no concordar con nuestra época, o podemos aceptarlas sin dudar, creyendo firmemente que pertenecen a nuestro momento, aunque estemos frente a un profundo deepfake.
Ante esta confusión de tiempos y colores, hay una forma de no dudar y saber exactamente lo que estamos viendo: hacerlo nosotros mismos. ¿Preparado? Podemos transformar el color, y por tanto el tiempo, con una IA accesible a través de nuestro ordenador o móvil. A día de hoy, es posible codearse con la inteligencia computacional a través de apps que facilitan el coloreado de imágenes para uso doméstico. Es el caso de DeOldify, un software que traduce una imagen en blanco y negro a color, y que tiene su versión más avanzada en MyHeritage, el lugar para colorear tu historia familiar.