Con sus trajes de cuero ajustados, sus grandes cinturones y un tupé perfectamente esculpido, Elvis cautivó a medio mundo. Tampoco pasó desapercibido el `Rey del rock Roll´ para unos grandes como The Beatles, quienes no perdieron la ocasión de visitarle en el verano del 65. Precisamente ese encuentro entre dos de los grandes referentes de la música del siglo XX tuvo lugar un día como hoy hace 48 años en la casa más famosa del mundo: Graceland, la mansión de Elvis.
Cuentan que la cosa no empezó demasiado bien, pues nada más llegar, un John Lenon de 25 años le preguntó qué había pasado con el viejo rockero Elvis. Visto que lo suyo no eran las palabras, Presley decidió pedir unas guitarras y como no podía ser de otra forma, la fiesta despegó. La habitación se llenó de sonidos improvisados y sobre todo de rock, de mucho rock&roll. «Mohair Sam» de Charlie Rich o «I Feel Fine» fueron algunas de las canciones que tocaron esa noche en la que Ringo, sin instrumento, decidió marcar el ritmo con los dedos sobre un mueble de madera.
Desgraciadamente para nosotros, las reglas del encuentro fueron: no prensa, no fotos, no grabaciones; y nunca más volverían a reunirse para tocar. Sin duda, una verdadera pena pues con toda seguridad, un álbum Elvis/Beatles no hubiese estado nada, pero que nada mal.
María del Río Resa
